Estudiar fuera de tu país puede abrirte más puertas de las que te imaginas. Los beneficios no son sólo laborales.
Estudiar en otro país es una aventura que llama la atención de muchos jóvenes y no tan jóvenes que buscan vivir nuevas experiencias, conocer gente y, al mismo tiempo, mejorar su nivel de otro idioma. Un año escolar en el extranjero le permite al estudiante ganar confianza en sí mismo cuando habla en un idioma extranjero, pero también representa un salto de madurez para él, aprendiendo a ser más tolerante con las diferencias culturales y a responsabilizarse de sus propios conflictos.
Enumeramos a continuación 8 beneficios de estudiar en el extranjero:
Mejora notable del idioma
Cuanto más tiempo estudie el candidato en el extranjero y más tiempo esté sumergido en la nueva cultura e idioma, más fluidez obtendrá. El hecho de recibir clases diarias junto con la interacción y convivencia con el mundo real hará que sus conocimientos lingüísticos mejoren notablemente, además de su confianza y seguridad. ¡Un perfeccionamiento del idioma para siempre!
Ampliar el vocabulario
Aprender un nuevo idioma no es lo mismo que vivirlo. Y viviendo una temporada en el extranjero, sumergiéndose en el idioma, el estudiante ampliará notablemente su lenguaje. Además, esto le permitirá adquirir nuevas expresiones y palabras propias de las personas nativas, con un acento mucho más auténtico.
Madurez personal y autonomía
Vivir fuera de casa es, sin duda, la mejor forma de conocerse a uno mismo y madurar. El sentirse solo ante lo desconocido, hace que uno mismo tenga que esforzarse para adaptarse al nuevo entorno lo más rápidamente posible.
Nuevas relaciones personales y convivencia
Con el nuevo entorno, familias y compañeros de residencia, amigos, profesores, etc. El hecho de tener que conocer una nueva cultura, totalmente distinta a la suya, hacer nuevos amigos y aprender a desenvolverse por sí mismo, le convertirá en una persona más independiente y segura de sí misma, hecho que le permitirá también conocerse mejor.
Nuevo sistema educativo
Un nuevo escenario académico es un reto estimulante para cualquier estudiante. Además, podrá participar en nuevas actividades que en España no son habituales, como por ejemplo clases de cocina, carpintería, laboratorios temáticos de ciencias y física, etc. Todo esto le permitirá poder poner en práctica los conocimientos adquiridos y tener un trato más cercano con el mundo profesional.
Adaptabilidad y apertura de miras
Cambiará la visión que el estudiante tenga del mundo y aprenderá a adaptarse a un nuevo entorno. En definitiva, se verá obligado a explorar un nuevo mundo y, sobre todo, a verlo de otra forma a la que está acostumbrado. Todo ello le permitirá conocer su entorno a la perfección y poder ser un gran anfitrión cuando reciba visitas de amigos y familiares durante sus numerosos descansos.
Mejora del CV
Indicar en el currículum que has pasado una experiencia en el extranjero es, sin duda, un rasgo diferencial y competitivo que ayudará al estudiante a encontrar trabajo en un futuro. Estudiar en el extranjero proporciona, sin duda, diferenciación tanto a nivel académico como profesional.
Reto personal con uno mismo
Una experiencia académica en el extranjero supone para el estudiante la oportunidad de comprobar el grado de autonomía y adaptabilidad al entorno que puede llegar a desarrollar.
Sin embargo, emprender un viaje de estas características no es una decisión fácil, especialmente si es para una estancia prolongada, ya que implica un cambio muy drástico en su rutina e implica muchas otras responsabilidades que probablemente no haya tenido que enfrentar solo antes.
En ocasiones, la parte económica es uno de los aspectos más problemáticos de estudiar en el extranjero. A veces, el importe de las ayudas económicas no es suficiente para pagar los gastos que un estudiante puede tener. Esto implica que el estudiante tiene que trabajar para pagarlo o que la familia se ve obligada a hacer un esfuerzo adicional para pagar la estancia.
Además, muchos estudiantes consideran que el idioma puede ser una oportunidad, pero también un problema. Asistir a clases, presentar trabajos y examinarse en el idioma desconocido puede ser muy difícil, aunque no imposible.
En mi opinión, es trabajo de todos preparar a los estudiantes-candidatos para el choque cultural de llegar a un nuevo país y describir las diferencias culturales que pueden sufrir, prestando consejos para una buena integración con los compañeros y una adaptación perfecta a las diferencias culturales más significativas.
Cualquier cambio en nuestra vida que suponga salir de la zona de confort nos genera ansiedad. Abandonar esta zona supone dejar a un lado aquello con lo que nos sentimos cómodos, es decir, apartarnos de nuestra rutina y entorno.
Todas estas preguntas que nos acechan de forma descontrolada en nuestra cabeza, no son más que un truco del cerebro para intentar prever situaciones difíciles. Como es normal, no podemos contestar ninguna de estas preguntas, de forma que nos ponemos más nerviosos y, consecuentemente, tenemos más preguntas… así entramos en un círculo del que no podemos salir.
En definitiva, si quieres afrontar este reto de forma eficaz coge papel y boli que aquí van los 10 consejos que te proponemos desde Aston Herencia:
- La solución no es ponerte en la peor situación y pensar cómo resolverlo, se trata de llevar todas las herramientas necesarias para poder solucionar cualquier problema.
- Estas herramientas se llaman fortalezas, y están dentro de ti.
- Todo el mundo tiene fortalezas y debilidades. Es importante conocerlas y saber cuándo usarlas.
- Las fortalezas son aspectos positivos de una persona, ser una persona sociable, perseverante, alegre, positiva, habladora, ordenada, puntual pueden ser algunas de las virtudes de alguien.
- Para usar las fortalezas debes estar tranquilo. Seguro que tienes trucos para tranquilizarte a ti mismo. ¡UTILÍZALOS!
- Mantén las emociones al margen, cuando estamos tranquilos podemos pensar de forma más racional. No te dejes llevar por la tristeza, por el miedo o el enfado. No pierdas de vista tu objetivo y sus beneficios.
- No son problemas son Tenemos el reto de aprender cómo llegar a la escuela, de aprender a comunicar a la familia lo que necesitamos, de conocer gente etc.
- Encuentra tus puntos de apoyo externos. En cualquier experiencia en el extranjero tendrás personas de contacto a las que recurrir en caso de duda. Busca personas con las que te sientas cómodo y puedas hablar ¡Este puede ser tu primer reto!
- Los problemas de allí se solucionan allí. Desde España nadie nos va a poder ayudar tanto como alguien del país de destino, existen barreras naturales y culturales que lo impiden.
- No podemos vivir en dos sitios a la vez. Por más que lo intentemos no vamos a ser capaces de llevar dos vidas paralelas, céntrate en tu experiencia en el extranjero, vive cada momento y déjate llevar, cuando vuelvas seguro que tienes un millón de anécdotas que contar.
Por último, creo oportuno realizar un par de recomendaciones:
- Es altamente recomendable que las personas que ya han estado en un programa de intercambio o estudios en el extranjero puedan asesorar y animar a futuros estudiantes al respecto.
- Sería recomendable también elaborar una lista de los pasos más importantes que se deben tomar antes de emprender un curso en el extranjero: alquiler de vivienda, seguro médico, tarjeta de viaje, registro académico, etc.
Si se implementan estas recomendaciones, haremos que más estudiantes estudien en el extranjero y tengan mejores herramientas para afrontar los problemas allí.
Todas las ventajas señaladas anteriormente, pasan a un segundo plano frente a ésta, la más repetida por los estudiantes que han tenido la suerte de salir de su país: estudiar fuera hará que tu mente se abra y tus horizontes se amplíen. En lo académico, la experiencia puede ser fantástica pero es lo personal lo que marca la diferencia. Salir fuera te obliga a perder tus referencias culturales y personales para buscarlas más allá de tus fronteras: ganarás amigos, conocerás intensamente otra cultura y tendrás que resolver múltiples problemas cotidianos que te harán superarte día a día. Que te hayas atrevido a estudiar fuera, además, dirá mucho de ti. Las empresas verán en tu currículum mucho más que un segundo idioma o un título. Sabrán que te has enfrentado a nuevos retos y que no te conformas con lo fácil.